Tag Archives: emigración vasca

Sucede que a veces

 “Pero sucede también que, sin saber cómo ni cuándo, algo te eriza la piel y te rescata del naufragio

Ismael Serrano (Sucede que a veces, 2005)

— ¿Sabes a qué día estamos?

— Estamos a 30. Me lo preguntas por el blog ¿verdad?

— Pues, sí. ¿Y? ¿Tienes preparado algo? No me digas que este mes no vas a escribir nada.

— No sé qué decirte. Me siento mal porque va a ser la primera vez que no escribo en los cuatro años de vida de Basque Identity 2.0. ¡Cómo pasa el tiempo! Cuando empezó todo esto me decía, “Qué menos que escribir al menos una vez al mes”. Pues ya ves, estamos a 24 horas de terminar mayo, y…nada de nada. No sé me ocurre nada. Quizás es hora de pensar que todo lo que tiene un inicio también tiene un final…

— ¡¡Cuatro años!! Y además estáis de enhorabuena, acabáis de renovar el diseño de todos los blogs…Si es que ya no nos da la vida. Cuánta razón tienes. Nos pasa a todos. No te preocupes. En fin…¿Y en que andas metido?

— Estoy preparando un trabajo que voy a presentar en una conferencia sobre “Testimonios Digitales de Guerra y Trauma” en Róterdam, entre el 12 y el 14 de junio. Ah, y lo mejor es que ya tenemos preparado la nueva edición de Euskal Herria Mugaz Gaindi, y ya va por la novena. Y esta vez lo hacemos en Bilbao.

— ¿Y de qué va?

— Vamos a hablar sobre las diversas migraciones y exilios vascos que han ocurrido a lo largo de la historia, pero haciéndolo desde la perspectiva de aquellos que regresaron a Euskal Herria. La verdad es que estoy muy ilusionado con el seminario por la buena aceptación que ha tenido: una veintena de ponentes, de once instituciones, de seis países…Y pensar que tan solo hace nueve años Mugaz Gaindi era una pequeña reunión de amigos interesados en el devenir de los estudios vascos y de aquellos que en su día abandonaron el país. Es increíble cómo cambia todo. Y sucede que a veces cambia a mejor.

— ¿Y cómo se llama? ¿Cuándo es?

— El título del seminario es “Reflexiones sobre los Retornos en las Migraciones y los Exilios Vascos”, y tendrá lugar en la Universidad de Deusto los días 18 y 19 de junio.

IX EHMG Deusto 2013

— Vaya mes que te espera.

— Pues, a finales de junio me voy a Estados Unidos con un nuevo proyecto de investigación.

— ¡Qué suerte! Ya me contarás. Dime, ¿y cómo vais a celebrar el décimo aniversario del Mugaz Gaindi?

— Y si te digo…Nueva York, Nueva York…pero bueno esa es otra historia.

— No me extraña que no tengas tiempo para el blog.

— Podría decirse que es así, el trabajo, ya sabes, pero…solo en parte…al principio del mes me volvió a escribir…

— ¿Ha vuelto de América?

— No. Sigue allí, tan lejos y tan cerca como siempre.

— ¿Qué te decía?

— Recordaba su última carta: “Anoche soñaba que despertaba jugando con tu pelo, que paseábamos por la arena y que tus dedos de brisa acariciaban mis sentidos, y que recorría toda tu espalda muy despacio, sin prisa pero sin detener el tiempo. Anoche creíamos que la lluvia no pararía, y hoy el sol nos indica que el tiempo continúa. Echaré en falta todo lo que pudo ser…

— Creo que es la mejor excusa que jamás he oído en mi vida para no actualizar un blog. Pero volverá, ¿verdad?

— Sucede que a veces la vida no es solo trabajo…“Y siempre es viernes, siestas de verano…abrazos que incendian la aurora en las playas del sur…”

Creative_Commons

Mundos invisibles

“Somos la memoria que tenemos y la responsabilidad que asumimos, sin memoria no existimos y sin responsabilidad quizá no merezcamos existir”

José Saramago (Cuadernos de Lanzarote, 1997)

Ante el relativo grado de desconocimiento de la sociedad actual—particularmente de las generaciones más jóvenes—sobre el hecho de la emigración vasca, y ante la inevitable desaparición de la última generación histórica de emigrantes y exiliados y de aquellos que en su día retornaron, desde la iniciativa Bizkailab de la Universidad de Deusto nos propusimos realizar un estudio urgente sobre la memoria e historia del país, empezando por el Territorio Histórico de Bizkaia. La finalidad era, y sigue siendo, la de entender y difundir la identidad y cultura de un colectivo, a través del testimonio oral de sus protagonistas—tanto de aquellos que en su día emigraron como de los que regresaron—que hasta cierto punto, a día de hoy, permanece relegado al olvido.

oletaAustraliar-haCelebración del tradicional encuentro anual vasco-australiano en su vigesimocuarto aniversario, Oleta (Bizkaia). Fila superior: Mario Satika, Begoña Barrutia, Koldo Goitia, Maribi San Antonio, José Badiola, Iñaki Etxabe y Anne Etxabe. Fila inferior: Mila Aboitiz, Mila Aberasturi, José Ignacio Etxabe y Angelita Fundazuri (Fotografía de Pedro J. Oiarzabal).

Durante meses, hemos tenido la oportunidad de conocer “mundos invisibles”, hilvanados por memorias de otros tiempos, que se entrelazan con las de miles y miles de vascos que por una razón u otra tuvieron que abandonar Euskal Herria, y que en algunos casos, tras décadas en el extranjero, decidieron regresar a su hogar. ¿Qué es lo que quedaba del hogar? ¿Cómo fueron recibidos a su regreso? ¿Qué fue de aquellos vascos que regresaron tras la larga noche del franquismo, tras las interminables jornadas cortando caña de azúcar en Australia o en la soledad más absoluta pastoreando en las colinas del Oeste Americano? ¿Qué ha sido de su historia, de nuestra historia colectiva, del patrimonio cultural inmaterial que conforman los miles de fotogramas que compone la historia más gráfica de la emigración y del retorno a Euskal Herria?

¿Quién no conoce a algún familiar, lejano o no, o ha oído hablar de un vecino o un amigo que probó fortuna como cesta-puntista en el Oriente o en las Américas; de un exiliado; de un pastor; de un cortador de caña; de un hijo o hija de aquellos que se fueron para no volver más? Amerikanuak, Australianuak, Venezolanos, Argentinos, Uruguayos…vascos y vascas con acentos e historias sin contar que conviven entre nosotros y que comparten culturas, lenguas, vivencias de emigración y experiencias de retorno—unas más felices que otras, no carentes de incomprensiones mutuas, y a veces incluso de rechazo. Conforman mundos que nos transportan a otros tiempos y espacios, mundos invisibles, virtualmente desconocidos, pero reales. Sus historias son indispensables para comprender nuestro pasado y nuestro presente como un pueblo abierto al mundo.

ArrosaAmerikanuak20122-haEncuentro anual de los Amerikanuak, Arrosa (Nafarroa Beherea). De izquierda a derecha Jean Luis Oçafrain, Gratien Oçafrain y Michel Duhalde; emigrantes retornados de Estados Unidos (Fotografía de Pedro J. Oiarzabal).

El estudio nos llevó a recorrer numerosas localidades del país y nos acercó a paisajes del Oeste Vasco-Americano, pudiendo realizar más de 46 horas de grabación a personas cuyas vidas les condujo a más de 12 países en América, Asia, Europa y Oceanía. Hoy en día, la historia de Euskal Herria se enriquecería aun más si cabe incorporando las páginas sueltas escritas por vascos y vascas en lugares tan dispares como North Queensland, Idaho, Nevada, Buenos Aires, Caracas, Montevideo, México D.F., Filipinas, Cuba, Yakarta y un largo etcétera. Añadamos esas páginas al libro de nuestra historia y démoslas a conocer. Apenas hemos empezado a vislumbrar las raíces profundas del fenómeno de la emigración, y sobre todo del retorno, que existen en nuestra sociedad, y de su significado histórico en relación al progreso y al bienestar que a día de hoy disfrutamos, y que es en cierta medida, también gracias a los sacrificios y esfuerzos de aquellos que tuvieron que abandonar su tierra.

El vídeo “Gure Bizitzen Pasarteak: Erbeste, Emigrazio eta Itzulera Bizkaira—Fragmentos de Nuestras Vidas: Exilio, Emigración y Retorno a Bizkaia” muestra una selección de entrevistas realizadas en 2012 a vascos que en su momento fueron refugiados, exiliados, emigrantes y que a día de hoy han regresado al país. Nos relatan con sus propias palabras sus historias de vida, entremezclándose los discursos y testimonios más racionales con los más profundos y emotivos.

video2

Es ahora más que nunca necesaria la implicación de la sociedad, sus instituciones y agentes sociales, y de modo especial la de la población emigrante, la retornada y sus familiares para que se constituyan en agentes activos y participes en la propia reconstrucción del fenómeno histórico emigratorio vasco. Tal y como dijo, en su día, el Premio Nobel de Literatura José Saramago “hay que recuperar, mantener y transmitir la memoria histórica, porque se empieza por el olvido y se termina en la indiferencia”.

[Si nació en Bizkaia y por cualquier motivo decidió emigrar a cualquier parte del mundo, y ha regresado a Euskadi, escribanos a bizkaia.retorno@gmail.com Por el contrario si conoce a alguien que emigró y ha regresado hágale llegar este mensaje. Eskerrik asko!]

Creative_Commons

En nuestro propio mundo

“Chile es el país más vasco entre los de América”.

Gabriela Mistral (“Tala”, 1938)

De esta manera tan rotunda, Gabriela Mistral (bautizada con el nombre de Lucila Godoy Alcayaga) describía Chile en el contexto de la tragedia fratricida que estaba asolando su tierra ancestral y la pasividad cómplice del mundo occidental:

“Es mi mayor asombro, podría decir también que mi más aguda vergüenza, ver a mi América Española cruzada de brazos delante de la tragedia de los niños vascos. En la anchura física y en la generosidad natural de nuestro Continente, había lugar de sobra para haberlos recibido a todos, evitándoles los países de lengua imposible, los climas agrios y las razas extrañas. El océano esta vez no ha servido para nuestra caridad, y nuestras playas, acogedoras de las más dudosas emigraciones, no han tenido un desembarcadero para los pies de los niños errantes de la desgraciada Vasconia. Los vascos y medio vascos de la América hemos aceptado el aventamiento de esas criaturas de nuestra sangre y hemos leído, sin que el corazón se nos arrebate, los relatos desgarrantes del regateo que hacían algunos países para recibir los barcos de fugitivos o de huérfanos. Es la primera vez en mi vida en que yo no entiendo a mi raza y en que su actitud moral. Me deja en un verdadero estupor.”

Las palabras de Mistral, “una mestiza de vasco” tal y como se definió en su día, dieron fruto en época de Pedro Aguirre Cerda, Presidente de la República de Chile (1938-1941), también de origen vasco. Aguirre Cerda, comprometido con la causa republicana española, nombró a Pablo Neruda Cónsul Especial de Chile para la Emigración Española convirtiéndose en el enlace oficial con el Gobierno de la Republica de España y el Gobierno Vasco en Paris. Tras un mes de singladura por el Atlántico y el Pacífico el 3 de septiembre de 1939 el carguero Winnipeg arribó al puerto de Valparaíso desde una lejana Francia con cerca de 2.200 refugiados de la Guerra Civil Española, entre ellos un significante número de vascos. Trascurridas cuatro décadas, Neruda recordaba aquellos días en “Para nacer he nacido” (1978) de la siguiente manera:

“Ante mi vista, bajo mi dirección, el navío debía llenarse con dos mil hombres y mujeres. Venían de campos de concentración, de inhóspitas regiones del desierto. Venían de la angustia, de la derrota y este barco debía llenarse con ellos para traerlos a las costas de Chile, a mi propio mundo que los acogía. Eran los combatientes españoles que cruzaron la frontera de Francia hacia un exilio que dura más de 30 años”.

090830114051_sp_aguirre_526x395

Imagen del Presidente Aguirre Cerda desplegada por los refugiados del Winnipeg a su llegada al puerto de Valparaíso. Fotografía: BBC Mundo.

Otros vascos de otras migraciones se encontraban desde tiempo atrás asentados en diversas localidades del país. En 1915, parte de la comunidad vasca de Valparaíso se organizaba entorno al Centro Vasco Chileno de Socorros Mutuos, embrión de lo que más tarde sería Eusko Etxea-Casa Vasca, creada en 1943 tras la visita al país del Lehendakari José Antonio de Aguirre en 1942. La visita se enmarcaba en una gira que le llevó a recorrer diez países americanos. No alejada de conflictos internos, la asociación se vio abocada a desaparecer, y no es hasta 1999 que un grupo de personas retoma el nombre de la histórica casa vasca.

Tres años antes de la conformación del Centro Vasco de Valparaíso, Santiago de Chile era testigo de la constitución de su primer Centro Vasco, hermanándose en la distancia con las ciudades de Montevideo (Uruguay) y de Rosario (Argentina), las cuales vieron durante el mismo año surgir entre sus comunidades de emigrantes vascos la Sociedad de Confraternidad Vasca “Euskal Erria” y el Centro Zazpirak-Bat, respectivamente.

El paso del tiempo, los relevos generacionales, y los acontecimientos políticos y socio-económicos en Europa—la Guerra Civil, el exilio, el Gobierno Vasco en el exilio, la postguerra, y la Segunda Guerra Mundial—tendrán consecuencias directas en las numerosas colectividades vascas de América y particularmente en sus asociaciones, verdaderos faros en los rompeolas americanos de la emigración y el exilio vasco durante décadas. Dentro del devenir del propio Centro Vasco de Santiago de Chile en 1931 se crea Euzko Gastedija (Juventud Vasca) con un compromiso político claro en relación al emergente movimiento nacionalista vasco de Euskadi.

No es de extrañar que ante el aporte ideológico de los recién llegados y coincidiendo con la visita del Lehendakari Aguirre a Santiago de Chile, ambas instituciones, Euzko Gastedija y el propio Centro Vasco, asuman su unificación, convirtiéndose posteriormente en la institución que hoy conocemos como Euzko Etxea, no haciendo discriminación en el origen de los vascos, ya fueran de un lado o del otro de los Pirineos, a la vez que establecían una nueva sede social en la actual Avenida Benjamín Vicuña Mackenna. Su construcción se inició en 1957.

santiagoEEzaharra-ha

Euzko Etxea de Santiago de Chile, 1960. (Fotografía cortesía de Pedro Oyanguren).

El pasado 15 de marzo Euzko Etxea celebró su primer centenario de vida. Durante el acto conmemorativo el Presidente de Euzko Etxea, José María Narvarte atestiguaba con sus palabras esa necesidad inherente al emigrante o exiliado de recrear un propio mundo vasco, situado entre el país de origen y el país de acogida, donde comenzar de nuevo, con la esperanza de que el esfuerzo realizado durante tanto tiempo tenga continuación:

“El vasco que abandona su pueblo, por distintos motivos y en distintos períodos de la historia, vive dos vidas: una soñando el anhelado retorno y otra, luchando día a día abriéndose un espacio vital, el de la subsistencia en otra tierra, en otro idioma, entre otras gentes. Y desde siempre, en ese diario vivir, le urge la necesidad de buscar un lugar de encuentro con los suyos, emulando instituciones, conservando sus tradiciones y su lengua… Nuestra casa cumple 100 años… Recordamos a los que ya no están y que hicieron posible su creación y su desarrollo y recibimos con los brazos abiertos a sus nuevos integrantes, savia nueva que hará posible perpetuar el sueño”.

Zorionak Euzko Etxea!!

Mi agradecimiento a Pedro Oyanguren y a Palmira Oyanguren por su inestimable ayuda.

Creative_Commons

i-bai musika

“La música es la taquigrafía de la emoción”

(Leo Tolstoy)

Mientras antropólogos culturales y etnomusicólogos nos relatan como la música es sin ninguna duda parte integral de una cultura y de las tradiciones orales de una sociedad, algunos sociólogos inciden en la importancia de la música y de las letras como elementos de socialización y de transmisión de información y de emociones. Aún más, investigadores pioneros en los campos de la neurología y psicología subrayan el impacto positivo de la música en nuestro desarrollo como persona y de nuestras propias estructuras emocionales. En sí, los sonidos en forma de canciones y relatos, al igual que aquellos aromas producidos en la cocina de nuestros mayores, se asocian a una memoria emocional anclada en un punto concreto de nuestra biografía. De esta manera, por ejemplo Joaquim Fuster argumenta que el motivo por el que una memoria es tan firme, tan sólida y tan duradera son las circunstancias emocionales en que se adquirió la memoria”. Ciertas memorias se encuentran asociadas a emociones específicas que son repetidas en el curso de la vida y que pueden ser evocadas, por ejemplo, por una determinada pieza musical, una imagen, un aroma o un sabor.

En nuestro pequeño planeta vasco han surgido un número de iniciativas innovadoras del ámbito cultural entre las que se encuentra muy especialmente Ibaimusic la cual reivindica el mundo de la música como forma de conectar con nuestras emociones, de relacionar nuestros sentidos con nuestras memorias, aunando en una misma sintonía-red a Euskal Herria y a la diáspora a través de la difusión de las diferentes tradiciones musicales vascas. Consecuentemente, esta propuesta cultural teje con intensidad una geografía de emociones y conocimientos que une a vascos de aquí y de allí, más allá de la distancia, y en donde Internet y las diversas aplicaciones digitales juegan un papel crucial. Nuestra comunidad global vasca toma cuerpo alrededor de un pentagrama acompañado por sus singulares signos musicales. El sociólogo vasco José Ignacio Ruíz Olabuenaga define esta comunidad como “una peculiar melodía constituida por las notas personales de todos los que nos sentimos vascos”.

Ibaimusicibaimusic “Emozioak lotuz-Conectamos emociones”

Proyectos como el de Ibaimusic nos proponen cientos y cientos de canciones que hilvanan cuentos e historias y nos transportan a otros tiempos y lugares que nos gustaría volver a visitar aunque fuera un instante…un solo instante. Nos acercan a placenteros recuerdos e imágenes que creíamos olvidados o desvanecidos en el tiempo, y que hacen que, al recuperarlos, las comisuras de nuestros labios se tornen en sonrisas. Imágenes de nuestra infancia inundan nuestra memoria y nos proyectan a otros tiempos donde lo imposible no existía en nuestro vocabulario y la vida se tornaba en un juego diario. ¿Cuál es la música vasca de tu niñez? ¿Qué recuerdos te traen las canciones e historias de tu infancia o juventud?

Y el tiempo transcurre. Y en nuestra memoria siguen perdurando un sinfín de sueños y de otros mundos posibles de alcanzar. Y a punto de iniciar un nuevo año echamos de menos las historias de aquellos vascos que decidieron quedarse en América, en Australia o en Europa y de aquellos otros que decidieron regresar y que durante años fueron recopiladas con extraordinaria paciencia por Alberto y por Kepa. Y seguimos echando de menos las palabras de Sergio y de tantos otros. Palabras forjadas por destellos de luz de estrellas que siempre dejan a la sombra vencida.

Jai Zoriontsuak eta Urte Berri On!!!

88x31